miércoles, 29 de junio de 2011

"Contra la desigualdad, no contra la diferencia."

Ser mujer no solo es fanatizarse con la ropa que está de moda. Ni tampoco, estar horas produciéndose cuando una ocasión importante la espera. Ser mujer no consiste solamente en llenar el ropero de vestimentas, los cajones de zapatos, las cajas de maquillajes y accesorios, las uñas de esmalte, el pelo de hebillas y clips invisibles.

Ser mujer es mucho más que eso. Ser mujer es tratar de cuidar la silueta, porque los hombres parecen no darles una oportunidad a aquellas que llevan unos kilos de más. Es ir cada quince días – aproximadamente – a depilarse con cera, porque los pelos en el cuerpo del sexo femenino son totalmente desfachatados y dan una imagen de dejadez. Mientras que entre los varones subsiste una estúpida teoría: cuantos más pelos tienen, más sexys son.Ser mujer también es concurrir a las depiladotas descartables, porque una invitación imprevista a una pileta surgió.

Ser mujer es soportar un dolor interno de ovarios, una vez por mes. Y además, aguantar que los demás no entiendan el mal estar y se empeñen en averiguar a que se debe aquel maldito estado anímico.

Ser mujer es llevar una nueva vida en el interior por nueve meses, cuando se planeo que eso sucediera o cuando un descuido sobrepasó la situación. Es sentir la magia del parto, y el dolor también. Es amamantar al recién nacido y descubrir una experiencia inigualable.

Ser mujer es ser discriminada en los trabajos, justamente por su condición de fertilidad. Es claro, a cualquier dueño de una empresa lo suficiente importante, no le conviene en lo más mínimo aceptar a una joven de veinte años, sabiendo que sus hormonas están a flor y piel; por lo que puede quedar embaraza. Porque en caso de que esto último suceda, por ley deberá cubrir una licencia de tres meses, sin trabajo a cambio. ¿Por qué a los hombres se les da dos días de Franco cuando su hijo nace? ¿Por qué no se les da tres meses como a la mujer? ¿A caso es la mujer la única responsable del bebe? ¿A caso el hombre no tiene derecho a pasar más tiempo con su hijo?

Ser mujer es sentirse totalmente frustrada cuando un hombre elige a otra, por ser más flaca, más alta, más linda, más entregada. Porque, aunque muchas afirmen que eso no les afecta, no hay peor cosa que el sexo masculino haga sentir a una mujer inferior e inválida.

Ser mujer casada es tener que llegar y hacer la comida para su querido esposo, y para sus hijos si es que los tiene. Es lavar la ropa, los platos, el piso. Es planchar, ordenar los cuartos. Atender al hijo, insistirle que haga la tarea del colegio, y amenazarlo con quitarle algo que le fascina si trae alguna mala nota. Mientras que el hombre cree que por tener algo que le cuelga entre sus piernas, es incapaz de hacer algo así (aunque por su puesto que no siempre es así).

Ser mujer, es crecer entre juguetes de cocina, de bebes, cochecitos, mamaderas, accesorios de limpieza. Al tiempo que los varones invaden sus cuartos de autos, de pelotas, de camisetas de fútbol. Por lo que, desde los primeros años de edad, que la mujer esta destinada a jugar un roll, y el hombre otro. La libertad de elegir, bien y gracias.


Depende de todos que las escaleras sean iguales.


Escrito por Naiara.

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